Estado debe destinar mayor presupuesto para contar con recursos humanos capacitados, asegura el fundador de la Universidad San Ignacio de Loyola.
CARLOS BESSOMBES
En medio de una naciente polémica, producto del interés del MEF por eliminar el incentivo a la exoneración del Impuesto a la Renta (IR) a las universidades que reinvierten sus utilidades, el ex primer vicepresidente de la República y fundador de la Universidad San Ignacio de Loyola, Raúl Diez Canseco Terry, plantea una ley de acreditación que asegure una oferta educativa de excelencia a todo nivel.
─¿Qué hacer para elevar la calidad educativa en el Perú?
En vez de que el Congreso debata una ley universitaria donde las universidades se van a politizar más, debería estar discutiendo una ley de acreditación no sólo de las universidades sino de todas las instituciones educativas públicas y privadas del país, que permita por fin ofrecer una calidad de educación mucho más competitiva. Esta acreditación debe estar liderada por el Ministerio de Educación.
─¿Qué países de América Latina ya cuentan con esta acreditación?
Colombia tiene una educación muy superior a la peruana por la acreditación, hasta el presidente Correa en Ecuador acaba de iniciar un proceso de acreditación a las universidades e instituciones. Chile, Argentina y Brasil han avanzado mucho en este aspecto. Acreditación significa evaluación permanente y constante ya que así se garantiza una educación de calidad.
─En ese contexto, ¿qué comentario tiene sobre el proyecto de ley enviado por el Poder Ejecutivo para eliminar la exoneración del IR a la reinversión de utilidades de las universidades privadas?
Eso es un disparate porque es meter a todas las universidades en un mismo saco. Si no hubiera sido por la ley que dio Alberto Fujimori, la Ley 882, que permite a las universidades usar recursos para ir mejorando sus capacidades e invertir en innovación, no existiría una oferta educativa de alta calidad. Claro que hay universidades y otras instituciones que dicen llamarse así, pero la misma ley dice que sólo se otorga este beneficio luego de una evaluación de las reinversiones por parte del Ministerio de Educación.
Por ello, esta ley necesita complementarse con la de acreditación, y así establecer primero una línea de base, que sirva a los padres de familia y a los alumnos saber en qué nivel está su universidad o centro de estudios.
─Entonces, ¿qué buscaría el Ejecutivo al eliminar este incentivo?
El proyecto enviado por el MEF solo tiene un objetivo: recaudar más a como dé lugar. Es algo increíble, porque solo nos preocupamos de la minería, la infraestructura y vivienda y nos olvidamos que esto no sirve si es que no hay recursos humanos calificados. Y otra cosa que se olvida el MEF es que una universidad privada está en el mundo de la competencia. Con la acreditación, el país va a poder garantizarle al padre de familia que las universidades son de categoría. Dime qué educación tiene tu país y te digo que país tendrás.
─¿Pero esta situación se puede cambiar?
El problema del Perú ahora no es de recursos económicos sino humanos porque no hay profesionales capacitados. Cómo quieres tener un profesional competente sino le pagas adecuadamente. ¿Por qué el Estado tiene que estar condenado a la mediocridad? Ese fue el peor error del presidente García cuando redujo la mitad del sueldo a todo el mundo y la mejor gente se fue, es un error pensar que si trabajas para el Estado, estás mal pagado. Por un lado se da el mensaje a los jóvenes que tienen que capacitarse porque es el camino al triunfo pero también se les dice si triunfas no vengas al Estado porque yo no te voy a reconocer.
─¿Cuál es el reto del país?
El reto del Perú es la descentralización, porque si te vas a Arequipa si bien ya han hecho 5 centros comerciales en dos años se piratean profesionales porque no hay. No hay ingenieros suficientes en el Perú y la receta del desarrollo es que de cada 10 profesionales por lo menos sean 7 ingenieros y tres abogados pero en el Perú es a la inversa. Si se habla de una economía que va a innovar a consecuencia de la crisis del 2008 que aún no termina debemos considerar que el nuevo orden mundial tendrá como primera economía a China, seguido por la India, EEUU y el cuarto Brasil, y el puente de Brasil hacia el Pacífico somos nosotros el Perú.
─¿Cómo debe implementarse la acreditación?
Debe ser una ley. En el concepto de la ley, debe incluir el mecanismo de cómo se conforman estas instituciones, donde la matriz tiene que ser controlada por el Ministerio de Educación que es el Estado peruano. Debe ser una política nacional y de ahí pedir know how. Hay una acreditadora muy incipiente de unas cuantas carreras, no todas, por lo que ahí hay que avanzar mucho.
─¿Las universidades podrían cumplir con esta acreditación?
Con un buen proceso de exigencia de acreditación va a mejorar en poco tiempo la calidad de la enseñanza en el Perú, porque a nadie le va a hacer gracia que lo multen o le quiten la licencia. Es una pirámide bien compleja el tema de la educación superior en el mundo ya que hay mucha deserción y acá todavía es muy alta.
─¿La acreditación también incluye al resto del sistema educativo?
También se evalúan los colegios y todos los estamentos de la educación del sistema. Aquí no se escapa nadie, y no tiene por qué el derecho de acreditación no costarle al Estado mientras que el privado sí tiene que pagar. La USIL ganó un concurso para capacitar a mil maestros por dos años, ahora están ganando los concursos que hay últimamente en las evaluaciones.Yo me pregunto, ¿acaso Áncash no tiene recursos del canon al igual que Arequipa, Cajamarca? Aquí tiene que haber un esfuerzo conjunto público - privado para sacar adelante a la educación.
CARLOS BESSOMBES
En medio de una naciente polémica, producto del interés del MEF por eliminar el incentivo a la exoneración del Impuesto a la Renta (IR) a las universidades que reinvierten sus utilidades, el ex primer vicepresidente de la República y fundador de la Universidad San Ignacio de Loyola, Raúl Diez Canseco Terry, plantea una ley de acreditación que asegure una oferta educativa de excelencia a todo nivel.
─¿Qué hacer para elevar la calidad educativa en el Perú?
En vez de que el Congreso debata una ley universitaria donde las universidades se van a politizar más, debería estar discutiendo una ley de acreditación no sólo de las universidades sino de todas las instituciones educativas públicas y privadas del país, que permita por fin ofrecer una calidad de educación mucho más competitiva. Esta acreditación debe estar liderada por el Ministerio de Educación.
─¿Qué países de América Latina ya cuentan con esta acreditación?
Colombia tiene una educación muy superior a la peruana por la acreditación, hasta el presidente Correa en Ecuador acaba de iniciar un proceso de acreditación a las universidades e instituciones. Chile, Argentina y Brasil han avanzado mucho en este aspecto. Acreditación significa evaluación permanente y constante ya que así se garantiza una educación de calidad.
─En ese contexto, ¿qué comentario tiene sobre el proyecto de ley enviado por el Poder Ejecutivo para eliminar la exoneración del IR a la reinversión de utilidades de las universidades privadas?
Eso es un disparate porque es meter a todas las universidades en un mismo saco. Si no hubiera sido por la ley que dio Alberto Fujimori, la Ley 882, que permite a las universidades usar recursos para ir mejorando sus capacidades e invertir en innovación, no existiría una oferta educativa de alta calidad. Claro que hay universidades y otras instituciones que dicen llamarse así, pero la misma ley dice que sólo se otorga este beneficio luego de una evaluación de las reinversiones por parte del Ministerio de Educación.
Por ello, esta ley necesita complementarse con la de acreditación, y así establecer primero una línea de base, que sirva a los padres de familia y a los alumnos saber en qué nivel está su universidad o centro de estudios.
─Entonces, ¿qué buscaría el Ejecutivo al eliminar este incentivo?
El proyecto enviado por el MEF solo tiene un objetivo: recaudar más a como dé lugar. Es algo increíble, porque solo nos preocupamos de la minería, la infraestructura y vivienda y nos olvidamos que esto no sirve si es que no hay recursos humanos calificados. Y otra cosa que se olvida el MEF es que una universidad privada está en el mundo de la competencia. Con la acreditación, el país va a poder garantizarle al padre de familia que las universidades son de categoría. Dime qué educación tiene tu país y te digo que país tendrás.
─¿Pero esta situación se puede cambiar?
El problema del Perú ahora no es de recursos económicos sino humanos porque no hay profesionales capacitados. Cómo quieres tener un profesional competente sino le pagas adecuadamente. ¿Por qué el Estado tiene que estar condenado a la mediocridad? Ese fue el peor error del presidente García cuando redujo la mitad del sueldo a todo el mundo y la mejor gente se fue, es un error pensar que si trabajas para el Estado, estás mal pagado. Por un lado se da el mensaje a los jóvenes que tienen que capacitarse porque es el camino al triunfo pero también se les dice si triunfas no vengas al Estado porque yo no te voy a reconocer.
─¿Cuál es el reto del país?
El reto del Perú es la descentralización, porque si te vas a Arequipa si bien ya han hecho 5 centros comerciales en dos años se piratean profesionales porque no hay. No hay ingenieros suficientes en el Perú y la receta del desarrollo es que de cada 10 profesionales por lo menos sean 7 ingenieros y tres abogados pero en el Perú es a la inversa. Si se habla de una economía que va a innovar a consecuencia de la crisis del 2008 que aún no termina debemos considerar que el nuevo orden mundial tendrá como primera economía a China, seguido por la India, EEUU y el cuarto Brasil, y el puente de Brasil hacia el Pacífico somos nosotros el Perú.
─¿Cómo debe implementarse la acreditación?
Debe ser una ley. En el concepto de la ley, debe incluir el mecanismo de cómo se conforman estas instituciones, donde la matriz tiene que ser controlada por el Ministerio de Educación que es el Estado peruano. Debe ser una política nacional y de ahí pedir know how. Hay una acreditadora muy incipiente de unas cuantas carreras, no todas, por lo que ahí hay que avanzar mucho.
─¿Las universidades podrían cumplir con esta acreditación?
Con un buen proceso de exigencia de acreditación va a mejorar en poco tiempo la calidad de la enseñanza en el Perú, porque a nadie le va a hacer gracia que lo multen o le quiten la licencia. Es una pirámide bien compleja el tema de la educación superior en el mundo ya que hay mucha deserción y acá todavía es muy alta.
─¿La acreditación también incluye al resto del sistema educativo?
También se evalúan los colegios y todos los estamentos de la educación del sistema. Aquí no se escapa nadie, y no tiene por qué el derecho de acreditación no costarle al Estado mientras que el privado sí tiene que pagar. La USIL ganó un concurso para capacitar a mil maestros por dos años, ahora están ganando los concursos que hay últimamente en las evaluaciones.Yo me pregunto, ¿acaso Áncash no tiene recursos del canon al igual que Arequipa, Cajamarca? Aquí tiene que haber un esfuerzo conjunto público - privado para sacar adelante a la educación.
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